2026 Será El Año del Despegue Inmobiliario Fuera de Lima
El mercado inmobiliario peruano está entrando en una nueva etapa marcada por la descentralización. El dinamismo del turismo interno, el desarrollo de infraestructura y la búsqueda de mayores márgenes de rentabilidad están impulsando a más inversionistas a mirar hacia las regiones. Todo apunta a que 2026 será un año decisivo para la expansión del sector fuera de Lima.
Un nuevo mapa inmobiliario en el Perú
Las zonas sur y norte del país se están posicionando como polos estratégicos de inversión. Con un crecimiento urbano acelerado, un entorno turístico en expansión y precios aún competitivos frente al mercado limeño, ciudades como Ica, Arequipa, Piura, La Libertad y Paracas están ganando protagonismo. Esta tendencia, en consolidación, podría redefinir las zonas de mayor plusvalía del país durante los próximos años.
De acuerdo con el INEI, la inversión privada en construcción cerraría el año con un crecimiento cercano al 3.5%, impulsada por proyectos turísticos, segundas viviendas y espacios destinados al descanso. A ello se suma el reporte de MINCETUR, que indica que el turismo interno ha crecido más del 25% en los últimos dos años, activando de manera significativa las economías regionales.
Una transformación estructural del mercado
Para Carlos Leyva, CEO de Invictus Grupo Inmobiliario, este comportamiento responde a un cambio profundo en la forma de invertir.
“El nuevo foco de la inversión está en regiones con identidad, conectividad y proyección. Invertir fuera de Lima no es una alternativa, es una estrategia para diversificar el riesgo y generar valor sostenido”, señala.
Con esta visión, el especialista identifica las cinco razones clave por las que 2026 es el momento ideal para apostar por mercados inmobiliarios regionales:
Potencial de crecimiento y plusvalía en expansión
Regiones como Ica, Arequipa y Piura están experimentando una fuerte expansión urbana. Sus precios por metro cuadrado siguen siendo competitivos, pero muestran una tendencia sostenida al alza debido al crecimiento demográfico y el turismo. Invertir hoy permite capturar la valorización temprana.
Auge del turismo interno
Los viajes dentro del país continúan aumentando, generando demanda por hospedajes, alquileres temporales y segundas viviendas. Este comportamiento abre oportunidades para desarrollos inmobiliarios orientados al descanso, la recreación y la inversión de corto y mediano plazo.
Infraestructura que impulsa el mercado
Carreteras, autopistas y aeropuertos regionales están reforzando la conectividad del país. Corredores como el sur chico, el eje Arequipa–Majes y el norte costero destacan por su dinamismo urbano y turístico.
Destinos como Paracas se consolidan como hubs de inversión cerca de Lima, con creciente demanda residencial y vacacional.
A esto se suman megaproyectos como el Corredor Ferroviario Bioceánico Central, que conectará Chancay con Brasil atravesando costa, sierra y selva. Este desarrollo impulsará el crecimiento logístico y comercial en regiones como Junín y Satipo, ampliando significativamente el atractivo inmobiliario.
Diversificación y seguridad para el inversionista
Apostar por regiones emergentes permite reducir la dependencia del mercado limeño y acceder a activos con alta proyección. La diversificación geográfica es clave para proteger la rentabilidad ante ciclos económicos o saturación de la capital.
Impulso al desarrollo local y la sostenibilidad
Invertir fuera de Lima no solo genera beneficios financieros: también promueve empleo, comercio y turismo, activando economías locales. Cada vez más inversionistas buscan proyectos con impacto social, sostenibilidad y valor compartido.
Mirada al futuro
“Con la mirada puesta en 2026, en Invictus Grupo Inmobiliario reafirmamos nuestro compromiso con el desarrollo descentralizado, impulsando proyectos que integren vivienda, turismo y sostenibilidad en distintas regiones del Perú. Para los inversionistas, el momento de mirar más allá de Lima ya llegó”, concluye Carlos Leyva.
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